Por fin llegó el gran día, la boda Real del año, el príncipe Williams y Lady K, ahora princesa Catalina, duquesa de Cambridge y futura Reina Catalina VI, ya son marido y mujer.
Como era de esperar con puntualidad inglesa a las 10:45h se desvelaba el secreto mejor guardado, el vestido de la futura reina ante la mirada de los 1.900 invitados. En este caso puedo decir, que si ha causado indiferencia, que sí, que el vestido está muy discretito y elegantón para una princesa, que no digo yo que sea feo ni mucho menos, pero el diseño del vestido que popularizó la gran Grace Kelly está ya muy mascado.
Lo hemos visto en todas sus versiones, en las más distinguidas bodas reales, pasando por la mediana aristocracia hasta las más “populachas”. Las enamoradas de este estilo, pueden encontrar su versión en Rosa Clará. La conclusión es que Sarah Burton (creadora de la obra, directora creativa de Alexander McQueen), no se ha partido los sesos en el diseño, la elaboración parece ser que ha sido otra cosa, con distinguidos bordados campestres evocando la feliz infancia de Lady K en su casa de campo… (la historieta como o sacada de un cuento). La cola de 2,70 metros, me parece corta, y más para una ahora princesa, me quedo con la kilométrica de Diana.
De los hombros hacia arriba “estilo Kennedy” que cada cual que lo interprete como quiera... A mí lo de los velos suelos en plan se me cae una cortinilla encima, me horroriza y el pelo semisuelto estilo hoy es un día cualquiera, aun más. Eso sí, la tiara, propiedad de la bisabuela de Willy es una exquisitez de Cartier, regalo de Jorge VI en 1936.
El ramo de novia ha sido un guiño a su amorcito, ya que estaba compuesto por flores conocidas en el Reino Unido como "Sweet William", una variedad del clavel de Japón, ramillete de Constantinopla o minutisa.
Junto a Kate en todo momento, su hermana Pippa, en consonancia con la novia, lucía un vestido de la misma diseñadora, de estilo Belle Époque, muy propio para una boda civil, pero ella no era la novia… Y el tono de su piel, cercano al de Lolita el día de su boda, cuestión de gustos.
Hasta aquí, la primera entrega que no la última de esta dichosa boda.
LA CHICA IBA BIEN MONA, LA VERDAD. Y LO MÁS IMPORTANTE, SE LES VEÍA ENAMORADÍSIMOS! NADA QUE VER CON EL HORROR-LOOK CON EL QUE LADY DIANA ATERRORIZÓ A LA HUMANIDAD juju
ResponderEliminarTE SIGO!
http://humordemoda.blogspot.com/2011/04/28-de-abril-de-2011.html
Hombre, hay que tener en cuenta que de la boda de Lady Di, ya hace 30años! Supongo que su traje de novia "merengón" sería lo más de la època!
ResponderEliminarjajajaja me encanta el “estilo Kennedy”!!!
ResponderEliminarDeberías hacerle un especial al coche de la última foto, se lo merece más que mi zapato hace un mes! (ARA)
No hija no, tú y tus zapatos os merecéis un especial y más!
ResponderEliminarUn besazo!