Madame Russo

No, no me refiero a Rene Russo, aunque salvaguardando las distancias (la actriz mucho más mona) se dan un cierto aire.

Seguro que si no la conocéis la habéis en visto en algún desfile, photocall o exquisita fiesta. Esta excéntrica italiana, sirvió para Vogue Italia durante más de una década y dio el salto a Japón donde es directora de la misma editorial.

Anna Dello Ruso, nació hace bastantes años (es una incógnita) en Bari, en Italia del sur, y ahora vive en Milán con su perro Cucciolina. Suele dar lecciones de moda en cada una de sus apariciones que convierte en un escaparate de lujo, eso sí  manteniendo siempre su exquisito estilo.

Famosa por su envidiable colección de ropa, presume de tener más de mil pares de zapatos de firmas como Prada, Miu-Miu, YSL o Gucci, aunque no me merece mucho merito suponiendo que la mayoría de estas firmas deben hacerle envíos masivos a esta directora con el objeto de ganarse su favor y conseguir publicidad gratuita, no solo en su editorial, con que Anna porte sus prendas, las creaciones darán la vuelta al mundo. 

http://thesartorialist.blogspot.com/2010/07/unstoppable-anna-dello-russo-milano.html

Hace poco se le preguntaba a su asistente en la revista New York Magazine por sus armarios, la cual contestaba: -Anna no tiene armarios, ni vestidores… Anna disfruta de un apartamento exclusivamente para guardar su ropa –“siempre a 15 grados celsius”-. El sueño de cualquier mujer o al menos el mío, aunque subiría la temperatura a unos 20ºC. Realmente no me imagino la casa de esta de esta mujer, mirando algunas de sus fotos en su web: http://www.annadellorusso.com/ me provoca entre curiosidad y miedo.

La desinhibida Anna, no duda en ejercer de modelo, para reportajes fotográficos o sobre una pasarela, hace poco la vimos desfilar para Lanvin, con unos de los vestidos que se han vendido el imperio sueco hace un par de días para las masas.

Dicen que posee una personalidad arrolladora, inteligencia por encima de encima de los límites, cuenta con seguidores por todo el mundo y eso sí, no deja indiferente a nadie.